Las warmis, zomo, mujeres del Sur, mujeres de los territorios ancestrales entregamos nuestra palabra florida en apoyo al Presidente Evo Morales Ayma, quien por el voto popular sigue siendo presidente del Estado Plurinacional de Bolivia.
Entendemos que Rita Segato tiene eco en el feminismo (blanco?) en el cual no nos reconocemos, por lo cual manifestamos nuestro profundo desacuerdo con la posición que Ud. ha tomado respecto a la restauración neoliberal golpista en Bolivia.
Cuando dice “Deberíamos comenzar a generar una retórica de valor a otra forma de valor que se distingue mucho a la gestión de los caciques.” Suena muy bonito. Preguntamos: ¿Le ha pasado en el cuerpo esa gestión de los caciques? Nosotras hemos visto, hemos sentido el sabor amargo de esa secuela de la conquista. Nuestros hombres han tomado lo peor del machismo colonial. Hemos construido no sólo retóricas, sino resistencias, re-existencias a la dominación machista en las naciones preexistentes y en cada uno de los espacios que el despojo nos colocó. Pero ubicar a Evo como el símbolo del patriarcado es demasiado chabacan.
No celebramos los dichos sobre la quinceañera de Evo, porque hemos sentido en nuestros cuerpos todos lo que significa la cosificación de nuestros cuerpos. El cuerpo ancestral, el cuerpo mental, el cuerpo físico y el cuerpo emocional. Aún así, afirmamos que lo que pasó en Bolivia fue un golpe de Estado.
Es mucho más sencillo analizar Bolivia de lo que Ud piensa. Su regodeo intelectual la nubló. ¿Quién lo llevó a cabo y con qué fin al Golpe? Son dos preguntas que ordenan nuestro sentipensar. Se dará cuenta que el golpe no prosperó por los indios de la Chiquitanía, ni las feministas de Bolivia, ni siquiera los “sectores más amplios de la población” que menciona como descreído del gobierno de Evo.
La gestión Trump y su artefacto hegemónico pretende recuperar Latinoamerica con el brazo evangelico mesiánico, con los poderes mediáticos que construyen relatos mentirosos y claramente con las fuerzas represivas policiales y militares que fueron oradadas a fuerza de inyección de dineros pocos sanctos en las almas turbias de la indianidad. Estan saliendo a luz, cada día, las pruebas que surgen respecto de la planificación extrema que tuvo este golpe.
Su voz no es cualquier voz. Plantea la vanguardia en la discusión en los círculos intelectuales y feministas en Argentina. Es por eso que en este caso Rita, disentimos amargamente y lo debemos hacer publicamente.
Hemos construido un sentipensar la ética política de nuestros pueblos que no vamos a callar, ni abdicar a los locus de privilegios de las mujeres blancas. Geolocalizadas en los sures, en las subalternidades, en la otredades que nos suponen inferiores, le decimos a Ud. que su voz duele. Sentiremos un gran vacío al no referenciarla más en nuestros sentipensares.
No podríamos romantizar el papel de las mujeres en el Golpe de Estado en Bolivia. No se trató de una rebelión ciudadana, ni feminista, ni originaria, ni siquiera democrática.
Lo peligroso de los discursos “no binarios”, como lo plantea es que terminan asimilando a dos posiciones contrarias como si fueran equivalentes. Para una mujer indígena que vive el machismo y la violencia en su vida cotidiana, no es lo mismo encontrarse con un servicio de salud laico y respetuoso de la salud ancestral que encontrarse con médicos antiderechos, que sojuzgan. Eso fue la Bolivia Plurinacional. No tendríamos por qué explicar que la redistribución de la riqueza genera otro escenario para la lucha y la liberación de género. Eso no lo logró ningún movimiento indígena despolitizado ni neutral en Latinoamérica. Lo logró el neoconstitucionalismo que engendró Evo refundando el Estado Colonial a Estado Plurinacional.
Nos preocupa que los argumentos que Ud expone para plantear “nuevas retóricas”, brindan un hermoso camuflaje, un eufemismo para el discurso racista que persiste en los sectores que la escuchan. De repente, muchas personas que no conocen “con el cuerpo” la realidad de una mujer originaria, niegan el golpe de Estado, lo plantean como fatalidad anunciada y ubican a Evo como el patriarca. ¿No será mucho?
La asimetría de los razonamientos “objetivos” o no objetivos es propio de la Colonia y por eso la nombramos. Nosotrxs sentí-pensamos con los cuerpos todos en el territorio. No somos ni queremos ser objetivas.
Corazón ordena pensamiento en nuestro sur. Siempre lo fue y lo seguirá siendo. Rechazamos su afirmación de que “Evo cayó por su propio peso” por falaz, más de 45% de los votos es ¿no tener peso? Romper las reglas del constitucionalismo tiene más peso que sostener un régimen democrático? Ud pesó las balas que están masacrando a nuestros hermanos?
A nosotros nos pesan las muertes de nuestra gente.
Hablamos desde nuestras propias lenguas y ahora escribimos con la lengua del conquistador para que Ud nos lea. Si quiere se lo decimos en mapuzungun, en chané, en chorote, en wichí, en pilagá, en guaraní, en quechua, en aymara, en qom, en mocoy y también se lo diremos en nuestros sueños.
Antes que feministas, mujeres poderosas del arco iris, complementarias de nuestros hombres feministos que dan el buen combate.
Pronunciamiento Político ante el Golpe de Estado en Bolivia. 20 de Noviembre de 2019